Fotografía de Víctor Carrillo
Rocosa y escarpada,
me tiendo al sol.
Me poso sobre el quicio de la ventana y dejo fosilizar los nervios.
Mis manos tiemblan ligeramente,
buscan temperatura para aguantar el invierno.
Tras el ojo izquierdo, un abismo al dolor.
En Noviembre se agrietaron los cráteres del "ya no más".